En el marco del proyecto “Acompañando a las comunidades”, la Asociación Civil Escuela de Vecinos La Pastora organizó una visita especial para los miembros del Club de Abuelos del Buen Consejo, provenientes de la parroquia de Caricuao. El sábado 9 de noviembre, este grupo de veinticinco (25) personas tuvo la oportunidad de recorrer los lugares más emblemáticos de Caracas que fueron testigos de la vida del Beato José Gregorio Hernández.
La jornada inició en la Iglesia de la Divina Pastora, un templo histórico que albergó la profunda fe del joven José Gregorio, quien acudía allí a orar diariamente. Los visitantes pudieron apreciar la belleza arquitectónica de este lugar y conectar con la espiritualidad que inspiró al futuro beato.
Posteriormente, el grupo se trasladó a la Plaza José Félix Rivas, donde admiraron una exposición fotográfica que retrata la vida de los habitantes de La Pastora. A continuación, se dirigieron a la esquina de Amadores, el trágico lugar donde José Gregorio Hernández fue atropellado. Allí, recordaron las circunstancias de este suceso y la conmovedora frase de la Beata Madre Candelaria de San José: “Ha muerto un santo”.
La visita culminó en la Casa-Museo del Dr. José Gregorio Hernández, donde los abuelos pudieron observar los objetos personales y los instrumentos médicos que pertenecieron al beato. Este recorrido permitió a los participantes conocer de cerca la vida y obra de este venezolano ejemplar, fortaleciendo su devoción y admiración.
Esta iniciativa de la Asociación Civil Escuela de Vecinos La Pastora no sólo permitió a los abuelos del Club del Buen Consejo disfrutar de un día lleno de historia y cultura, sino que también contribuyó a promover el turismo religioso en Venezuela y a mantener viva la memoria del Beato José Gregorio Hernández.